Historia y Propiedades Mágicas del ámbar

La luz del sol y la belleza de antiguos amaneceres descansan en el ámbar. La naturaleza ha dotado al ámbar con propiedades dispares, todas ellas maravillosas, que convierten al ámbar en, probablemente, la piedra más especial encontrada por el hombre. Y es por sus cualidades, su belleza, su grácil disparidad de colores y por la delicadeza y originalidad de sus formas que esta “piedra de reyes” ha cautivado a cientos de generaciones antes que a nosotros.

El ámbar es la piedra del Sol, y el astro rey confiere a esta pequeña gema un extraordinario poder. Es difícil encontrar una cultura que no haya tenido en el sol una de sus deidades más poderosas, y esa fuerza solar descansa plácidamente en el ámbar, es por ello que el poder energético del ámbar ha protegido a las personas a lo largo de los tiempos ante casi cualquier situación. En efecto el ámbar es una joya ancestral, y ya desde los primeros tiempos el hombre la usa como adorno, uno de los primeros y más representativos ejemplos lo encontramos en la corona de Tutankhamón, que se encuentra jalonada por perlas de ámbar.

La magia y la ciencia no han sido siempre disciplinas antagónicas, en la antigüedad las fronteras de lo visible y lo invisible estaban poco definidas. De hecho, el nombre mismo de la electricidad, proviene del nombre en griego del ámbar (ελεκτρον, elektron) que significa “Yo protejo”. Tales de Mileto descubrió que frotando unas varillas de ámbar con la piel se obtenían pequeñas cargas eléctricas que atraían pequeños objetos, así se utilizó el nombre del ámbar para nombrar al fenómeno y la ciencia que lo estudia, la electricidad.

El ámbar, por sus cualidades electromagnéticas, ha sido desde tiempos inmemoriales una piedra considerada mágica. Desde la antigüedad la gente creía que dentro de una pieza de ámbar viven los espíritus, y se han considerado particularmente fuertes las piezas en las que se hayan capturados insectos y hojas, que a menudo se utilizaban para ritos sagrados y religiosos.

El ámbar es el Sol, el fuego, el oro, la energía, el poder, la salud y el amor. El ámbar es un tesoro vivo.